Borzoi
Origen y Evolución
En sus orígenes, los antiguos lebreles asiáticos eran utilizados en labores de pastoreo, pero dado que las inmensas llanuras eran lugares perfectos para que los depredadores como el lobo pudieran diezmar los rebaños, se fueron seleccionando aquellos que tuvieran una gran valentía.
Con el paso de los años fueron utilizados para la caza, en especial del lobo, y para ello se buscaban los ejemplares más rápidos.
Referencias sobre esta raza aparecen con mucha frecuencia en la literatura rusa. Los cruces que dieron lugar al Borzoi fueron los que se realizaron entre lebreles y otros perros asiáticos de pelo más largo, así como con nórdicos (Laikas), para mejorar la resistencia al frío.
Dada la antigüedad de la raza, sus orígenes no están contrastados con exactitud; por ello hay opiniones que aseguran que sus orígenes están en razas salvajes; otras que procederían de los mismos perros que dieron lugar a otras razas como el Greyhound, el Afgano y el Saluki; también se estima la posibilidad de que procedan de unos antiguos perros de caza de osos, incluso de una antigua raza de pastoreo llamada Pastor de los Cárpatos; asimismo, no se descarta la posibilidad de que procedan del Liptok, un perro lapón de color blanco y de proporciones semejantes a los San Bernardo.
Sin embargo, su popularidad y prestigio vinieron de la mano de la aristocracia rusa, más concretamente de Nicolai Nicolayevitz, quien estableció en Tula uno de los mayores criaderos de la historia. El éxito que obtuvo se debía no sólo a sus dotes cinegéticas, sino a sus ademanes y elegante estampa.
En 1873 se determinaron por parte de la Asociación Imperial para el Desarrollo de los Galgos y las Leyes de Caza siete variedades de Borzoi, según el tipo de cabeza, estatura, pelaje y color. Sin embargo, la raza se salvó de la extinción después de la revolución de 1917 gracias a las exportaciones que se habían hecho, sobre todo, al resto de las cortes europeas.
Descripción del Borzoi
La apariencia general del Borzoi es la de un perro de una nobleza inequívoca, proporcionada por su tamaño imponente, su abundante pelaje, la belleza de los colores, el equilibrio en sus proporciones y la elegancia y la armonía de sus líneas y movimientos. La cabeza debe ser estrecha, enjuta y fina; la longitud del hocico es algo mayor que la del cráneo, éste tiene el parietal plano, de suave caída hacia atrás y estrecho; el morro es fuerte, largo, estrecho, enjuto y de poca profundidad; la trufa es relativamente grande y negra sea cual sea el color del pelaje; los ojos son grandes, almendrados, y el color del iris es lo más oscuro posible; las orejas están implantadas en la parte superior de la cabeza bastante atrás y son relativamente pequeñas. Su cuerpo es ligeramente alargado. El dorso, especialmente en los machos, forma un arco aplanado cuyo punto más alto se sitúa en la confluencia del pecho con la región lumbar. La cola está insertada bastante baja, en forma de sable o falciforme, fuerte, con mucho pelo y lo más larga posible. La altura a los hombros de los machos es de 70-82 centímetros o más; en las hembras, de 65-77 centímetros; la altura de la cruz es igual o superior a la del sacro. Los miembros anteriores son largos y de músculos enjutos. Las extremidades posteriores son largas, pero más musculosas y de ángulo menos perpendicular que las extremidades delanteras.
El pelaje es largo, sedoso, ondulado o rizado. Especialmente espeso y abundante en el cuello, en la parte inferior del pecho, en la parte posterior de las patas delanteras, en las ancas y en la cola. Corto sólo en la cabeza, las orejas y la parte delantera de las patas.
Los colores admitidos son blanco, dorado en todas sus tonalidades, dorado con reflejos plateados, oro con velo oscuro, rojo con velo negro en el morro y las patas oscuras, gris, de gris ceniza a gris amarillento, atigrado, dorado, rojo o gris con bandas más oscuras, rojas, negras y todas las tonalidades de estos colores. En los perros de color oscuro es típico observar una máscara negra, así como amplias marcas oscuras en el cuerpo. Todos estos colores pueden presentarse solos o sobre un fondo blanco. En los perros unicolores, éste es más oscuro en la parte superior y se va aclarando hacia el abdomen y la parte posterior de las patas.
Carácter
De su carácter cabe destacar la tranquilidad y actitud reservada, así como la seguridad y la valentía. En las peleas puede convertirse en un peligroso contrincante para los perros luchadores, ya que, a pesar de la elegancia de su aspecto externo, se trata de un animal fuerte empleado para la caza.
Antaño poseían un carácter fiero sobre todo por la actividad que desarrollaban; sin embargo, en la actualidad es un extraordinario perro de compañía que se adapta bien a la vida en la ciudad siempre que se le permita hacer un mínimo de ejercicio diario, ya que le gusta y necesita correr, por ello, es conveniente llevarle al campo con frecuencia.
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