Kew: un jardín para el mundo
■ Entrar a Kew Gardens, el Jardín Botánico de Londres, es transportarse a un mundo de cielos vastos y colores que alegran el alma, donde árboles centenarios de copas grandiosas comparten generosamente con quien se acerque su solidez y su frescura.
El jardín, que recibe cada año un millón de visitantes y ha sido declarado por la UNESCO patrimonio de la humanidad, celebra 250 años de vida y a lo largo de todo 2009 habrá eventos especiales para marcar el aniversario.
En las 130 hectáreas de Kew viven cerca de 14.000 árboles.
Kew Gardens alberga la mayor colección de plantas del mundo -unas 30.000 especies de plantas vivas- además de material único recolectado por exploradores como Charles Darwin.
Este año aniversario sus cuidadores prometen que los colores a la llegada de la primavera serán más espectaculares, con nuevas exposiciones y diseños de jardines. Y el concurso de fotografía anual tendrá una nueva categoría: jardines alrededor del mundo.
Explore el mundo de Kew y sus vínculos con A. Latina
En BBC Mundo lo invitamos también a que comparta el jardín botánico de su ciudad con nosotros
Pero igualmente espectacular es lo que no se ve a simple vista, la otra cara de Kew, la de su trabajo de investigación y conservación, que tiene un impacto cada vez mayor a nivel global.
El Banco de Semillas del Milenio, el Herbario, las investigaciones en genética, los cursos abiertos a estudiantes de todo el mundo, son algunos de los tesoros que extienden la influencia de Jardín Botánico de Londres a otros rincones del planeta, incluyendo a muchos países de América Latina.
El Banco
Poco se imaginaría la princesa Augusta, madre del Rey Jorge III, hasta dónde llegaría su jardín cuando comenzó el ambicioso proyecto en 1759. Al inicio el jardín tenía 3,6 hectáreas en torno a su residencia, el Palacio de Kew, a orillas del río Támesis. Pero generación tras generación de jardineros expertos y botánicos fueron dejando su marca en el jardín actual, de 132 hectáreas.
Todo comenzó en 1759 con el jardín iniciado por la Princesa Augusta.
Hoy Kew emplea 220 cientificos y mas de 60 estudiantes de doctorado que trabajan en equipos multidisciplinarios.
Sus centros de investigacion incluyen el Herbario -con mas de siete millones de ejemplares de plantas secas, el Laboratorio Jodrell -con la mayor coleccion de hongos del mundo, y un Banco de ADN.
Otro de los centros, el Banco de Semillas del Milenio, administrado por Kew pero ubicado en otro jardin, Wakehurst Place, alberga mas de mil millones de semillas preservadas en un deposito subterraneo a veinte grados bajo cero. Se trata de un verdadero seguro ante la desaparicion de especies amenazadas y puede ser crucial ante el cambio climatico.
Su colección alcanzará el año próximo una de sus metas iniciales: contener semillas de un 10% de las cerca de 300.000 plantas silvestres que se consideran más vulnerables.
En sus ocho años de existencia, el Banco ha suministrado miles de semillas y material de investigación a otros centros, contribuyendo por ejemplo a la recuperación de cinco millones de hectáreas en Australia, a mejorar suelos en Egipto o a investigaciones sobre aceites esenciales en Brasil.
Un experto de Kew recoge semillas en Chile.
Para recolectar semillas, el Banco debe firmar un acuerdo con cada país sobre el futuro uso de las semillas y su material genético. El contenido del documento es un asunto delicado y crucial para asegurar que el país que provee las semillas tenga acceso a los posibles beneficios económicos que se deriven de ellas.
En muchos casos, Kew envía técnicos que también ofrecen cursos para el personal local en recolección de semillas. Hay acuerdos de trabajo, por ejemplo, con la Universidad Autónoma de México y el Instituto de Investigaciones Agropecuarias de Chile.
Kew y América Latina
Las colaboraciones con México y Chile son sólo dos ejemplos de los más de 800 acuerdos de trabajo que Kew ha establecido con instituciones alrededor del mundo.
Botánicos de Kew trabajan con expertos en Perú para recuperar el árbol del huarango.
En Perú, por ejemplo, botánicos de Kew están ayudando a reestablecer el árbol del huarango en los valles áridos del sur del país, uno de los ecosistemas más frágiles del mundo en el corredor angosto de desierto entre los Andes y el Pacífico.
El huarango, el árbol con raíces más largas del mundo, está especialmente adaptado a esta región y es capaz de traer agua a capas superiores del suelo, permitiendo así la vida de otras especies. Si desaparece el huarango, avanza el desierto.
Una experta de Kew también trabaja con una ONG en Argentina, la Asociación Civil Los Algarrobos, desarrollando entre otros proyectos cursos sobre cambio climático y preservación del medio ambiente, que se transmitirán en radio para profesores de escuelas en las provincias de Salta, Catamarca, Jujuy y Mendoza.
Kew está abierto al mundo, y eso incluye también sus programas para estudiantes, desde los cursos de tres años en horticultura, hasta los de ocho semanas en conservación de plantas o administración de Jardines Botánicos, que reciben estudiantes de distintos países.
Lucha por los recursos
Kew alberga grandes invernaderos de la era victoriana.
Kew es financiado sólo en parte por el gobierno, por lo que se hace una prioridad buscar constantemente fuentes de ingresos en forma creativa. En el año fiscal que culminó en 2008, por ejemplo, Kew recibió 25 millones de libras del gobierno (US$34 millones), con lo que cubrió sólo un 45% de los costos.
El jardín recaudó 16 millones de libras en donaciones y cerca de 12 millones por ingresos de visitantes (una entrada para adulto cuesta 13 libras, unos US$18) y venta de sus productos y libros.
La Fundación Kew ha recaudado desde 1990 unas 60 millones de libras a través de donaciones de fundaciones, acuerdos y legados privados de individuos que recuerdan en su testamento al jardín que tanto significó para ellos en vida.
Un jardín para el siglo XXI
¿Cual es la misión de un jardín botánico en el siglo XXI? Tanto en Londres como en ciudades alrededor del mundo, los jardines botánicos ofrecen una puerta a un mundo mágico de belleza y solaz espiritual. Pero el papel de Kew y de jardines en otros países es también crucial por sus tareas de conservación e investigación y por su rol vital en educación al nivel más amplio, a nivel de escuelas, del público, de la sociedad en general.
Debemos reconectar a los seres humanos con su hábitat natural, mostrarles el daño que se está cometiendo y cómo pueden contribuir a paliarlo ". Dr. Nigel Taylor, curador de Kew Gardens
Especialmente en momentos en que enfrentamos el desafío del cambio climático, preservar y restaurar hábitats naturales aumentará la absorción de dióxido de carbono y evitará las emisiones producidas por su destrucción, un factor "que pasa desapercibido para la mayoría de la población del planeta que hoy en día vive en ciudades, divorciada de la naturaleza", dijo a BBC Mundo el Dr. Nigel Taylor, curador de Kew.
"Debemos reconectar a los seres humanos con su hábitat natural, mostrarles el daño que se está cometiendo y cómo pueden contribuir a paliarlo".
A 250 años de su nacimiento, Kew Gardens celebra su historia, mientras sigue expandiendo su presencia global. En un planeta que lucha por preservar sus hábitats naturales y mitigar el impacto del cambio climático, el futuro de Kew y su contribución al mundo son más importantes que nunca.
Fuente: Alejandra Martins│ BBC.
Compartir
Publicado por Fali A las: 5:59
Etiquetas: Construcciones
0 comentarios:
Publicar un comentario