Alaskan Malamute
Origen y Evolución
En el norte del continente americano se encuentra el estado de Alaska, territorio que fue vendido a los Estados Unidos en el año 1867. Allí vivía originariamente un pueblo llamado mahlemiut el término «mahle» no se sabe qué significaba, pero sí el de «miut», pueblo de, por lo que mahlemiut significaba el pueblo de Mahle.
Esta tribu era muy apreciada por las demás, vivían de la pesca y, sobre todo, de la caza del caribú, a los que seguían en sus migraciones. Para ello utilizaban un tipo de perro más grande que los de las otras tribus, con la cola apoyada sobre el lomo y de belleza lobuna, debido al hecho de que para aumentar su resistencia cruzaban a las perras, a las que ataban cuando estaban en celo a cientos de metros del poblado, con los lobos árticos.
Se desconocen las razones por las que las manadas de caribúes cambiaron las rutas de sus migraciones, pero sí que estos cambios influyeron en la vida de los mahlemiut (malamutes, en su grafía inglesa), por ello, entre otras razones, los ejemplares de perros de los malamutes eran cada vez menos numerosos.
Fueron los primeros estadounidenses, en la época de la búsqueda de oro en los territorios del norte, al ver lo útiles que resultaban estos animales, quienes empezaron a criarlos.
Al final del siglo XIX aumentó el uso de los perros de trineo y las carreras adquirieron un gran auge; para poder alcanzar los primeros puestos de la clasificación final los perros necesitaban ser rápidos y ligeros, así que los canes malamutes entraron en franca decadencia; sólo gracias al esfuerzo llevado a cabo por algunos criadores después de la II Guerra Mundial se pudo salvar a esta potente y ancestral raza canina.
Descripción del Alaskan Malamute
La apariencia general del Alaskan Malamute es la de un perro con un aspecto muy activo y porte orgulloso, con la cabeza erguida y los ojos alerta. Debe manifestar físicamente todas las aptitudes de trabajo para las que ha sido seleccionado, es decir, fuerza, resistencia, potencia... La expresión es dulce e indica una disposición afectuosa. La marcas faciales le diferencian perfectamente del resto de razas nórdicas. La cabeza es ancha y profunda; si exceptuamos a los ejemplares de color rojo, todos deben tener la trufa negra; se acepta la «nariz de nieve», es decir, con una banda más clara; los ojos están dispuestos oblicuamente en el cráneo, son marrones, de forma almendrada y de tamaño medio; los ojos azules son una falta descalificable; las orejas son de tamaño medio, aunque pequeñas en proporción con la cabeza; de forma triangular y ligeramente redondeadas en sus extremos, no deben estar implantadas muy altas. El cuerpo es compacto, pero no excesivamente corto. La altura de los machos es de 63,5 centímetros (38,5 kilogramos de peso) y la de las hembras, de 58,5 centímetros (34 kilogramos de peso). El dorso es recto y en suave descenso hasta las caderas; el lomo es fuerte y musculoso; el pecho está bien desarrollado. La cola se inserta moderadamente alta y siguiendo la línea de la espina dorsal en su base; la lleva sobre el dorso cuando no trabaja; pero no muy enroscada. Las extremidades delanteras tienen fuerte osamenta y están muy musculadas. Las extremidades posteriores, vistas desde atrás, están en aplomo, sin situarse demasiado separadas ni cercanas.
El manto del Malamute posee dos tipos de pelos, de guarda, espeso y áspero, y de cobertura, suave y denso. Debe ser blanco en la cara, patas y abdomen, y en el resto puede ser de color gris, negro, blanco y rojo. La variedad negra es muy habitual, incluso si se tiene en cuenta que muchos de los llamados negros son una variedad de gris; deben ser negros el pelo exterior y el subpelo. La variedad gris es la más frecuente de todas, en ella se encuadran varias categorías: el gris lobo, con el pelo exterior gris y subpelo gris claro, crema o blanco, no debe tener ninguna evidencia de color rojo, aunque sí puede parecer negro en la línea dorsal; el foca Alaska, también llamado falso negro o gris carbón, debe tener el pelo exterior negro o con las puntas negras, pero con el subpelo blanco o crema, a simple vista el perro parece negro; el tono gris plata debe tener el pelo exterior gris claro y el subpelo blanco; otra tonalidad de la variedad gris es la arena (sable) o wolf sable, que posee el pelo exterior negro o gris con subpelo rojizo y pinceladas rojas. La variedad blanca es la única de color uniforme admitida en la raza, sin embargo, es muy poco habitual; su pigmentación ha de ser negra, hecho muy difícil de conseguir, suelen tener una suave máscara de color crema. En la variedad roja se distinguen dos colores, llamados rojo y marrón; el primero es más claro y luminoso que el segundo, sin mostrar ningún factor negro; los labios, la trufa y los párpados son marrones.
Debido a las exigencias del color por parte del estándar no se recomiendan cruces de determinados colores entre sí, por ejemplo, rojo con rojo, para evitar problemas de despigmentación.
Carácter
El Alaskan Malamute es la raza nórdica de carácter más difícil, posiblemente debido a sus orígenes salvajes o a los cruces consanguíneos llevados a cabo para su recuperación. Un ejemplar adulto debe ser afectuoso y amistoso, aunque no llega a ser un perro de un solo dueño. Leal y devoto, dispuesto al juego si se le invita, impresiona por su dignidad una vez alcanza la madurez.
Debido a su carácter, resulta recomendable adiestrarlo correctamente: los dos problemas más importantes son la sociabilización y la cohabitación, que deben realizarse ya a edades tempranas, recurriendo a técnicas inspiradas en la jerarquía dentro de la manada, al respetar las relaciones de dominancia y sumisión características de grupos de cánidos.
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