Zapatero afronta con optimismo sus cien primeros días al frente del Gobierno,pese a la crisis económica

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os expertos aconsejan a Zapatero abaratar el despido contra la crisis.

 

En plena resaca de sus cien días de gobierno le pedirán este jueves que baje el Impuesto de Sociedades

El Gabinete de Zapatero se siente satisfecho de sus primeros cien días al frente del Gobierno y de cómo ha cogido por los cuernos al miura de la crisis económica. Al menos, así lo admitió este viernes la vicepresidenta primera, Teresa Fernández de la Vega.

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Pero la complacencia y el optimismo antropológico del Ejecutivo tropiezan de bruces con la dura realidad. Los datos macroeconómicos cantan y los españoles soportan un alza de precios del 5% desconocida en la última década. Amén de una subida de tipos de interés, que comienza a poner en serios aprietos a más de una familia en el pago mensual de su hipoteca. Y es que a los españoles el dinero les cuesta tres puntos más que a los americanos.

Por no hablar de las siete compañías del sector inmobiliario y de la construcción que en las últimas semanas han presentado suspensión de pagos ahogadas por una deuda de casi 8.000 millones de euros (1,4 billones de las antiguas pesetas). Por si fuera poco, el precio del petróleo no cesa en su escalada alcista. De hecho, esta semana registró su punto más álgido, al situarse el barril de crudo en 147 dólares. Su insoportable precio sacó en junio a las carreteras españolas a los transportistas.

Al Gobierno le pilló por sorpresa una huelga que se prolongó una semana. Un error de comunicación de La Moncloa ayudó a que los ciudadanos hicieran acopio de artículos de primera necesidad. Y un error de cálculo del Gobierno en la duración del paro generó el desabastecimiento de las gasolineras las primeras 48 horas de la huelga.

Sin embargo, el jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha permanecido impasible durante estos meses ante un panorama nada halagüeño. Y, como si no fuera con él, se ha negado día tras día a llamar a las cosas por su nombre y a utilizar la palabra crisis. Término que usó, por primera vez, la semana pasada. Pero de ahí a admitir que estamos en una crisis y de las gordas, no ha pasado. Por eso, el Ejecutivo no elaborará un nuevo plan de choque que prepare a la economía española para sortear mejor la crisis.

De hecho, Zapatero se sentará el próximo miércoles frente al presidente del PP a escuchar sus propuestas en esta materia. Pero nada más. No habrá ni media medida nueva para combatir la crisis, al menos, eso es lo que aseguran en La Moncloa. Y es que el Ejecutivo considera suficiente para reactivar el mercado español las cincuenta adoptadas en estos primeros cien días desde la investidura de Zapatero. La medida estrella de este paquete fue la bajada de 400 euros en las retenciones de las nóminas, decisión que, en su día, criticó hasta los sindicatos.

Aunque no habrá nuevo plan anticrisis, el jefe de la Oficina Económica de La Moncloa, Javier Vallés, ha citado el jueves, un día después de la reunión de Zapatero con Rajoy, a expertos económicos para realizar un diagnóstico de situación. Algunos de ellos propondrán actuar sobre la oferta, en lugar de sobre la demanda. Y recomendarán recetas tradicionales en situaciones como la actual: bajada de la presión fiscal a los empresarios. Es decir, una rebaja en Sociedades y en las cuotas que pagan a la Seguridad Social. El director del Instituto de Estudios Económicos, Juan Iranzo, invitado al encuentro, aseguró ayer a LA RAZÓN que, además de las medidas anteriores, aconsejará al Gobierno flexibilizar el mercado laboral o lo que es lo mismo abaratar el coste del despido. En este último caso, Zapatero está atado de pies y manos, si cumple su compromiso adquirido con los agentes sociales. El presidente descartó cambiar las reglas de juego del mercado laboral sin previo consenso de sindicatos y empresarios. Como atado de pies y manos está frente a Cataluña. De ahí que en estos primeros cien días de gobierno haya presentado en plena crisis una propuesta para reformar la financiación autonómica, en contra de la voluntad de Pedro Solbes. Pese a todo, el PSOE ha convocado a los suyos este martes por la tarde a celebrar en Madrid los cien primeros días de gobierno. Sin embargo, un error, supuestamente de comunicación, eclipsará la celebración. El Consejo de Política Fiscal y Financiera se reúne ese mismo día y a la misma hora para negociar la nueva financiación autonómica.

 

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