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Biografía de Terri Schiavo


• BIOGRAFÍAS

 biografia

Luz que se apaga. Una activista pro-vida enciende una vela junto a un retrato de Terri, al lado del centro donde la cuidaban en Florida.

{ 3-XII-1963 31-III-2005 }

■ Caso de muerte asistida. Un desequilibrio en los niveles de potasio, por culpa de una bulimia, provocó que estuviera postrada en estado vegetativo desde 1990. Nacida en Pensilvania, un juez permitió la desconexión de la máquina que la mantenía con vida. El marido abogaba por ello; los padres se negaban. El presidente Bush y el Vaticano lamentaron su muerte.

"Los responsables pagarán por este crimen"

Resulta difícil creer que hayan pasado nueve meses desde la trágica muerte de Terri. En esta coyuntura, mi familia y yo queremos aprovechar la oportunidad para darles las gracias, de todo corazón, por todo el apoyo que nos prestaron para tratar de salvar la vida de Terri. Fue muy positivo para mi esposa, Mary, mi hijo, Bobby, mi hija, Suzanne y, en particular, para Terri.

Ver que una persona se consume y se deshidrata hasta morir —mucho más si es la propia hija— es algo tan cruel que no hay modo de olvidarlo. Ser testigos de cómo le iban abandonando sus últimas fuerzas mientras luchaba desesperadamente por aspirar algo de aire está más allá del ámbito del entendimiento humano. Así y todo, los mercaderes de la muerte mediante eutanasia, que eran responsables de haber infligido a Terri tanto sufrimiento, tuvieron la audacia de decir que tuvo una muerte en paz y con dignidad.

No vamos a descansar hasta que todos y cada uno de los responsables de haber orquestado su muerte paguen ante la Justicia por este crimen contra la Humanidad.

A lo largo de los últimos seis meses hemos estado convenciéndonos de que teníamos que rehacer nuestras vidas sin ella. Aunque Terri ya no esté con nosotros, su recuerdo seguirá vivo. Nos consuela saber que contribuirá de manera decisiva a salvar las vidas de otras personas vulnerables que corren el riesgo de convertirse en víctimas inocentes, como lo fue la propia Terri.

Como familia, nos hemos comprometido a hacer todo lo que esté en nuestra mano para impedir que nadie más pase jamás por la misma tragedia que Terri tuvo que sufrir.

Bob y Mary Schindler son los padres de Terri y pretendían su custodia para cuidarla en casa

"En su estado actual, ella no habría querido vivir"

Durante seis años me he enfrentado a los Schindler en los tribunales. Comprendo todo por lo que están pasando. Comparto esos mismos sentimientos. En los años transcurridos desde el accidente, he intentado por todos los medios encontrar el remedio que la cure. No he dejado de visitar a médico tras médico. Estaba dispuesto a cualquier cosa para que se pusiera bien. Prácticamente, todos ellos me han confesado que no había ninguna posibilidad de que se recuperara. Finalmente, los médicos y los terapeutas nos dijeron, a los Schindler y a mí, que no había nada más que hacer por ella.

Nunca he querido que Terri muriera. No lo quiero ahora. Después de más de siete años de intentar por todos los medios que Terri se curara, la muerte de mi propia madre me ha ayudado a darme cuenta de que me estaba volviendo loco. Más importante aún es que me estaba parapetando detrás de mis esperanzas y haciendo caso omiso egoístamente de los deseos de Terri. Quería que mi esposa siguiera conmigo hasta tal punto que yo no quería ver la situación en la que realmente se encontraba. Me he echado a mí mismo las culpas de no haber conseguido recuperarla.

En varias ocasiones, antes de que le ocurriera lo suyo, ella me dijo que en su estado actual no habría querido vivir. Si hubiéramos sido más mayores, estoy seguro de que habría firmado un testamento vital en el que habría dejado claro que no quería que la mantuvieran viva a base de tubos y máquinas. No llegó a tener esa oportunidad. Esa circunstancia ha hecho que sea yo quien lleve adelante sus deseos. Creo que Terri habría querido que lo hiciese.

Michael Schiavo, marido de Terri durante 21 años, era luterano y defendía su "muerte en paz". Este texto figura en Tampa Bay Online,

Por Bob y Mary Schindler y Michael Schiavo

http://news.tbo.com/news/mga9dxb31md.html

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